La lectura es una de las actividades más importantes para la formación de un estudiante completo y exitoso. Además de ampliar el vocabulario y mejorar la escritura, la lectura también desarrolla importantes habilidades cognitivas como la concentración, la imaginación y el análisis crítico. Cuando se anima a los estudiantes a leer desde una edad temprana, se les está preparando para un futuro de éxito académico y personal.
No es sólo en el salón de clases donde la lectura es importante. También es fundamental para la formación del carácter y la identidad de un individuo. A través de los libros es posible explorar otras culturas y épocas históricas, ampliar horizontes y descubrir nuevas perspectivas. Además, la lectura ayuda a comprender el mundo que nos rodea, haciéndonos más críticos y conscientes de la sociedad en la que vivimos.
Finalmente, es importante recordar que la lectura es una actividad placentera y que puede traer innumerables beneficios a la salud mental y emocional del niño. Leer es una forma de escapar de la rutina y permitirte viajar a diferentes lugares y realidades. Además, la lectura es una forma de entretenimiento que no necesita pantalla ni electrónica, lo que puede ser un alivio en medio de la constante exposición digital que vivimos actualmente. Por eso fomentar la lectura es una inversión valiosa y redituable en la formación de alumnos más críticos, conscientes y exitosos.